miércoles, 26 de junio de 2024

Que Cada Uno Se Ofrezca Con Amor Al Otro, Que Lo Haga Siempre Con El Corazón Abierto

Mensaje de la Inmaculada Madre María y de Jesucristo a Angélica en Vicenza, Italia, el 7 de junio de 2024

Queridos hijos, la Inmaculada Madre María, Madre de todos los Pueblos, Madre de Dios, Madre de la Iglesia, Reina de los Ángeles, Rescatadora de los Pecadores y Madre Misericordiosa de todos los hijos de la tierra, he aquí, hijos, también hoy Ella viene a vosotros para amaros y bendeciros.

Hijos míos, vengo, me siento en medio de vosotros y extiendo ampliamente Mi manto materno, para que todos os sentéis sobre él. Vengo a uniros y a haceros comprender la belleza de estar unidos.

¡Ya lo veis, hijos! Si vosotros, hermanos y hermanas, estáis unidos en esta tierra, para Dios Padre Celestial es como estar siempre entre Sus hijos; Su familia terrenal unida en la santidad celestial.

Hijos míos, ¡si conocierais la delicia de la unión, qué sabrosa es! Ofreceos cada uno con amor al otro, hacedlo siempre con el corazón abierto, y al hacerlo, vosotros mismos en ese momento comprenderéis y diréis: «¿Por qué no hicimos esto antes? ¡Qué hermosa es la unión que nos ofrece y sugiere el Padre Celestial! Huele a santidad, hace bien a la mente, al corazón y al alma, ¡y he aquí que siempre habrá en nosotros la sinfonía celestial, la sinfonía del amor, la sinfonía de las Cosas Santas que Dios Padre nos dirige a todos!

¡Hacedlo, hijos! Vengo a educaros en esto, haré de vosotros cristianos ejemplares que, cuando llegue el día, ¡notarán el gran asombro del inmenso Padre Celestial!

Alabad al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.

Os doy Mi Santa Bendición y os agradezco que Me escuchéis.

¡Rezad, Rezad, Rezad!

Jesús apareció y dijo

Hermana, es Jesús quien te habla: ¡Te Bendigo En Mi Nombre Tres, Que Es El Padre, De Mí El Hijo Y El Espíritu Santo! Amén.

Desciende cálido, acariciador, colorido, brillante, santo, santificador y jugoso de las Cosas de Dios sobre todos los hijos de la tierra y hazles comprender que hay que poner fin a los conflictos lo antes posible, ¡para que reine la paz en la tierra, en el cielo y en los corazones de los hijos de Dios!

Hijos, el que os habla es vuestro Señor Jesucristo, el que a menudo os habla y os enseña cómo vivir en esta Tierra, ¡pero a menudo no se os escucha!

Hijos, persisto aunque no Me escuchéis porque sé que tarde o temprano Me escucharéis, pues el dolor que os afligirá será tan grande que comprenderéis que sólo Yo soy vuestro refugio seguro y amoroso. No esperéis al dolor, hijos Míos, acudid a Mí primero, acudid a Mi pozo sin fin, ¡allí es donde están los frutos jugosos, los frutos santos que os dan alegría y amor!

Vamos, ¡hacedlo por Mí y por vosotros mismos!

¡Os bendigo en Mi Nombre Trino, que es el Padre, de Mí el Hijo y el Espíritu Santo! Amén.

La Virgen estaba vestida de blanco con un manto celestial, en la cabeza llevaba una corona de doce estrellas, en la mano derecha tenía dos palomas blancas unidas por el pico, y bajo sus pies estaban los niños de la primavera sumergidos en un jardín de rosas amarillas.

Había Presencia De Ángeles, Arcángeles Y Santos.

Jesús Apareció Vestido De Jesús Misericordioso, Tan Pronto Como Apareció Hizo Recitar El Padre Nuestro, Sobre Su Cabeza Llevaba Una Tiara, En Su Mano Derecha Tenía Un Vincastro Y Bajo Sus Pies Había Humo Negro.

Había Presencia De Ángeles, Arcángeles Y Santos.

Fuente: ➥ www.MadonnaDellaRoccia.com